Ciertamente está bien la crítica social, pero Carlos Velázquez está como el cuate que sacó un documental, Morgan Spurlock (Súper Size Me), “denunciando” el peligro de comer hamburguesas a diario… sí, hamburguesas en el desayuno, comida y cena, provocando serios problemas en su salud.
Incluso Morgan Spurlock va y se para frente a un local de comida rápida, de manera retadora, para “enfrentar” el reto de estar comiendo hamburguesas durante todo un mes, a todas horas.
Pues así está Carlos Velázquez: si va a meterse a los barrios bravos de Torreón ya sabe con lo que se va a topar.
Criaturita.
Está como Julio Patán con su Manual del Borracho, por un lado muestra la problemática social pero por otro lado la reta, la desafía. Al menos Monsiváis tenía su encanto, un discurso elaborado, deconstruyendo fenómenos pop del momento pero dándote pistas para que saques conclusiones después de soltar la carcajada.
El de Monsiváis era un humorismo lúcido. Velázquez me recuerda a Letras Libres con su número dedicado a las series de TV (mejor me pongo a ver la tele, la cultura mexicana qué).
Aparte de que el libro de Carlos Velázquez podría quedar obsoleto pronto puesto que la violencia se ha transplantado a otras regiones (Durango, Sinaloa, Chihuahua, Tamaulipas, incluso Nuevo León). Si este va a ser un documento histórico tal como asegura el portal Animal Político, las siguientes generaciones se van a sentir bastante decepcionadas de la decadencia de la cultura regional.
¡Tiembla Vito Alessio Robles! (el historiador de Saltillo).
Y encima los laguneros se sienten muy gallos con sus intenciones separatistas.
Velázquez ha creado un nuevo tipo de ensayo, el “ensayo-Vice” o también conocido como “ensayo reporte índigo”, una nueva vanguardia hipster. ¿El karma de vivir al norte? Ya lo creo…
*COSAS ODIOSAS: El Estadito Laguna. Augusto Peña cuestiona si puede fincarse algo bueno en cimientos locales podridos como lo son los gobiernos coludidos con las grandes empresas… Porque a nivel Coahuila –específicamente en la Laguna- el proyecto del Estadito Laguna, junto con el tradicional acarreo de votantes y la compra de votos -lo hicieron los priístas en julio 7- al PAN le robaron la elección. Usaron de señuelo a uno de los dueños de SORIANA, y ahora -este señor y sus asociados o cómplices, por omisión o comisión, como distractor electoral en en Estadito Laguna- dicen querer un estado nuevo, el de La Laguna; porque “están hartos” de que Saltillo y Durango capital, no le den lo justo a la Laguna. Si eso dicen ellos, que son ricos y beneficiarios de las componendas Grandes Empresarios/Gobierno, ¿cómo estaremos las víctimas y clientes de ellos, las clases medias y los pobres?
Panorama 