Desconectar la mañanera puede ser lo mejor para prender el cerebro.
Eidie
Estuve intentando escribir durante mucho tiempo y comencé varias cosas, pero no pude concretar, solo un tema y muchísimos datos duros: “La mañanera” ha sido mi dolor de cabeza durante estos últimos años en los que Andrés Manuel ha ejercido una violenta campaña de desinformación.
El presidente hizo una pausa en su conferencia mañanera el este lunes 25 de enero ya que se encuentra contagiado de Covid19, y desde hace unos días se respira un poco de paz, en el medio del caos de la pandemia, este silencio de Andrés Manuel nos permite descansar de los dardos venenosos que se disparan diariamente desde su tribuna, Andrés apostó a dividir a los mexicanos y lo logró, y nos equivocamos cuando creímos que eso era lo peor y que ya que hasta ahí llegaría y no él no se detiene; a quienes no le brindan obediencia ciega, o critican a su populismo son atacados comienza tratando de dañar su reputación e imagen, a través de burlas e insultos eleva la voz con intención de humillar e intimidar, calumnia para desprestigiar a sus enemigos, enemigos que solo son imaginarios.
Detox Andrés.
¿Y saben qué? Conmigo no, conmigo ya no; yo haré un cambio una dieta, un Detox, algo radical, un paro total, es necesario dejar de consumir todo lo que dice ha sido demasiado, su programa tiene un alto contenido de mentiras, un vocabulario tóxico, exponer diariamente al cerebro a este tipo de discurso que solo brinda información repetitiva, específica y predeterminada con un solo un objetivo: controlar, dividir, agotar, engañar, y sobre todo desanimar.
“Si no tienes un plan, estás destinado a fallar”
Es evidente que nosotros tenemos que preocuparnos del camino, pero también nos tenemos que ocupar del andar … Me voy a ocupar de mi vida, de mi salud, de consumir información útil para tomar acciones, la gente inteligente crea planes y toma acciones. Siempre me he atrevido a pensar diferente, tengo claro que mi mente recibe señales, y se activan mis emociones, despiertan sentimientos y entonces decido.

Mi primera acción es establecer un límite saludable con Andrés Manuel, no puedo cargar mas con sus quejas y emociones, si permito a través de su programa me siga marcando mi agenda diaria me enganchó, y este poder que le doy se manifiesta en mi humor, y prácticas diarias, se puede decir que me dejó influenciar, persuadir o también se le puede llamar control social, y no puedo permitirlo más, necesito mi mente sana, necesito vivir sanamente.
No escucharé más lo que dice Andrés, porque no hay congruencia entre lo que dice y sus acciones en la Presidencia de la República, nos queda debiendo mucho a los mexicanos, a los que votaron y a los que no votaron por él, todos somos mexicanos, incluso los que viven fuera de México, y quiero que quede claro que seguiré las acciones y los resultados de este Gobierno es mi derecho, yo le voy a quitar el poder más grande que tiene, el poder de mi atención.
“La libertad no consiste en hacer lo que nos gusta, sino en tener el derecho a hacer lo que debemos”.
Enmedio de la pandemia de tanto dolor, de esta falta de calor humano, y en pleno pleno de un duelo que se vive a solas, que es muy difícil procesar porque no nos podemos reunir para rezar, para consolarnos, viviendo entre tantos “no se puede” con la cara casi cubierta y en un cambio de vida total, tenemos que ser muy cuidadosos de nuestra mente, de a quien dejamos entrar en nuestros pensamientos, no es bueno, ni sano, ni lógico estar lidiando todo el tiempo con alguien que solo nos está provocando con sus palabras y formas; llegando al punto de pensar que tenemos que aguantar lo más que se pueda como sociedad porque es el Presidente; ¡pues no! me niego le quitó mi atención y como consecuencia pierde su fuerza sobre mí, y no significa que deje de existir solo significa que es incapaz de provocar emociones en mi, atenderé lo que hace Andrés Manuel, no a lo que dice Andrés Manuel; porque no me sirve, ni me es grato y mucho menos me beneficia; deseo que se tome su tiempo, todo el tiempo que sea necesario, mejore su salud, y cuando regrese mi monitor seguirá apagado para usted Andrés Manuel soy muy clara; no me aporta y no me importa.

FUENTE: conxiones.com